La competitividad de los vehículos eléctricos puros a batería y de los camiones eléctricos está cada vez más cerca. Se prevé que empiecen a serlo entre 2025 y 2030 respecto a los modelos que funcionan a base de combustión interna.
Una muestra se da a través del análisis del Coste Total de Propiedad incluido en un nuevo informe presentado por Transport & Environment que determina precisamente que los coches eléctricos serán competitivos hacia 2025, mientras los que funcionan con pila de combustible de hidrógeno podrán serlo en 2030.
Para ello se ha publicado un informe bajo el nombre “Posibles opciones y vías tecnológicas para conseguir un transporte de mercancías por carretera sin emisiones de carbono en España” y que se ha hecho por Cambridge Econometrics, en el que se llega a la conclusión de que para efectuar una transición más rápida hacia los sistemas de propulsión basados en tecnologías de cero emisiones se pueda reducir así de manera drástica las emisiones de CO2 de toda la flota del transporte de mercancías que pasa por carretera.
La línea de acción a seguir
Según el informe también se alerta de la necesidad de trabajar en todo lo relativo al despliegue que se haga adecuado de la infraestructura de recarga de alta potencia en el caso de los camiones cero emisiones, iniciando de la manera más rápida el proceso para evitar en el futuro los cuellos de botella..
Carlos Bravo, responsable de políticas de transporte de mercancías de T&E ha explicado lo siguiente al respecto: “No será posible conseguir la descarbonización total del transporte de mercancías sin apostar por las tecnologías cero emisiones en camiones y furgonetas. Lamentablemente, en España, hay un gran desfase entre las políticas actuales y las que serían adecuadas para dotar al sector de una trayectoria coherente para lograr ese objetivo”.
Lograr, precisamente, una mayor o menor rapidez en esta implementación pasa también por el desarrollo de ciertos aspectos como las baterías, sistemas de carreteras eléctricas y células de combustible, el desarrollo de los combustibles alternativos al diésel o la gasolina, etc.
También es importante contar con una regulación a nivel europeo y estatal, que permita avanzar de manera certera y mucho más rápida para poder lograr la descarbonización del transporte de mercancías por carretera, algo que permitirá precisamente lograr llegar a una verdadera descarbonización e ir hacia el escenario de las cero emisiones lo más rápido posible, incluso antes del año previsto, en 2050.