Puede decirse que “El Gordo” ha tocado en Valladolid. Lógicamente no el de la Lotería de Navidad, aún quedan dos meses para celebrarse el sorteo, pero sí con la creación de una nueva fábrica de vehículos eléctricos que según las estimaciones generará un total de 7.000 puestos de trabajo, 2.000 directos y 5.000 indirectos.
El Ayuntamiento de Valladolid ha dado el primer paso para su construcción, al aprobar en la Junta de Gobierno Local la licencia de obras que permite a la empresa Switch Mobilit comenzar con los trabajos de construcción de la fábrica, que supondrá todo un revulsivo en la capital vallisoletana, especialmente, en materia económica y de empleo.
Más de 100 millones de euros de inversión
Con la aprobación de la licencia de obras (proyecto básico y de ejecución), la compañía Switch Mobility puede comenzar las obras de la primera fase de esta fábrica en la que se prevé la creación de 2.000 puestos de trabajo directos, aunque también debe solicitar un permiso de actividad para el trabajo de la maquinaria.
La inversión que realizará la compañía es mareante, por encima de los 100 millones de euros, para que la nueva fábrica vallisoletana de vehículos eléctricos sea una realidad. Según las previsiones que maneja el consistorio pucelano, las obras podrían finalizar antes de que acabe el 2023, fecha en la que se espera que la fábrica comience a fabricar los primeros autobuses eléctricos.
Tiempo récord
El alcalde de Valladolid, Oscar Puente, aseguró que en el proceso se ha actuado «con la máxima diligencia, en tiempo récord», pues ha recordado que hace exactamente diez meses se realizó la primera presentación del proyecto de Switch y hace apenas siete meses, el 16 de marzo, se registró en el Ayuntamiento la primera instancia relativa a la parcela que ocupará Switch.
Para sacar adelante este proyecto, se llevó a cabo una modificación del planeamiento general urbanístico para adecuarlo a los requerimientos de la nueva instalación, que se aprobó de forma inicial el 6 de junio y después de distintos informes y trámites se ha dado el visto bueno provisional en el Pleno a primeros de octubre, y solo falta la aprobación definitiva por parte de la Dirección General de Urbanismo.