Una de las principales preocupaciones de todo comprador de un coche eléctrico son los años que puede funcionar sin fallos. Un hecho que se relaciona con la novedad de un sistema que quizás no conocemos bien. La novedad es algo que asusta o que preocupa, pero en realidad, como toda la tecnología actual, tiene un ciclo de vida concreto.
La suerte juega también un papel importante, como en todo en la vida, los accidentes ocurren y todo se puede romper, incluso el propio ser humano que es, en esencia, la máquina más perfecta que existe. El coche eléctrico sufre las consecuencias de una tecnología que puede verse afectada por algunos factores clave.
Hay un número máximo de kilómetros recorridos con tu coche eléctrico
Cada conductor, marca y modelo de coche son distintos, por los que debemos coger los datos con pinzas. De acuerdo con las matriculaciones establecidas y los análisis actuales que nos permiten conocer un poco más el coche eléctrico, se puede recorrer un número de kilómetros sin fallos o estar unos años tranquilos.
Un ciclo de vida que no se diferencia demasiado de un coche convencional, sino más bien todo lo contrario. Podemos llegar a un máximo de acuerdo con unos elementos que son fundamentales. Se estima que durante los primeros 7 años o entre 150.000 y 200.000 kilómetros, la batería estará en perfectas condiciones.
Eso significa que nos despreocupamos de reparaciones, siempre y cuando tengamos esa suerte de tener un coche que no tenga fallos. Puede tener algún error, aunque los expertos cada vez más están pendientes de la revisión de los coches antes de salir de las fábricas, por lo que el porcentaje de coches que pueden marcar error será muy bajo.
Nada es para siempre, ni un coche eléctrico. Una esperanza de 7 u 8 años o de miles de kilómetros en perfecto estado es más que suficiente para sacarle el máximo partido a cualquier coche eléctrico. Ahorraremos en combustible y mantendremos el medio ambiente, asegurando un futuro para las nuevas generaciones, provocando 0 emisiones.
Hasta 3.000 ciclos de carga sin fallos en tu coche eléctrico
La parte más delicada de todo coche eléctrico es la batería, pero debemos tener en cuenta que nos garantizan más de 3.000 ciclos de carga. Son muchos días y kilómetros, si multiplicamos estas cargas por el tipo de desplazamientos y autonomía que hacemos, conseguiremos hacernos una idea de la durabilidad de un coche eléctrico.
Carga la batería hasta un 80% no la apures al máximo, pero tampoco al mínimo para conseguir que te dé lo mejor de un mecanismo que debe tener un ciclo de vida. La manera en la que usemos este coche eléctrico, procurando mantener las piezas y conduciendo de forma eficiente, es lo que marcará la diferencia y les dará a las baterías una vida un poco más larga.
En esencia, la vida útil de un coche eléctrico no se diferencia demasiado de un coche convencional. La gran diferencia está en las reparaciones, más o menos caras, pero igual de molestas para el bolsillo. Todo coche cuando empieza a tener errores, la mejor opción es venderlo o cambiarlo por otro.
Estamos acostumbrados a que los coches nos duren décadas, cuando la edad media para cambiar de coche son 5 años, garantizando la seguridad total de la familia. Los coches españoles tienen una edad de más de 13 años, con lo cual, son los más viejos de Europa. Es importante disponer de un cambio siempre que sea necesario o que empiecen los fallos. La diferencia de un coche eléctrico es que son más jóvenes en este mercado dominado por el diésel o gasolina, pero aún les queda mucho recorrido por dar.