El continente más pobre del mundo, África, es el origen de Opibus, el primer autobús eléctrico diseñado y fabricado en este continente. Las grandes ciudades más contaminantes del mundo, como El Cairo, necesitan encaminarse hacia la energía verde y para conseguirlo, nada mejor que un tipo de vehículo fabricado en el mismo continente. Una opción que pone en el mapa un país como Kenia que es el lugar en el que nace este autobús eléctrico.
La principal diferencia con los modelos que se han vendido en Europa es el diseño y la forma de trabajar en la carretera. Sin grades materiales o formas, se ha optado por crear un vehículo de lo más práctico que acabará siendo el que marcará la diferencia. Una opción que acabará siendo la favorita a la hora de exportarse por ese continente y quizás por otros.
Una carrocería de los años 70 para el primer autobús eléctrico hecho en África
Exteriormente parece un autobús de los años 70, pero en su interior tenemos una maquinaria de lo más eficiente. No sigue la estética actual, aunque quizás la idea de aprovechar piezas exteriores de otros vehículos no va tan desencaminada, especialmente en un continente como África en el que hay cierta escasez de materias primas.
El sueño de que lo eléctrico llegue también a las zonas más pobres del planeta, supondrán el equilibrio perfecto en un planeta 100% eficiente. Una manera de convertir un sector de lo más demandado fuera de este continente en uno de los prioritarios en el actual, sin disparar los costes, algo imprescindible en estos momentos.
Los combustibles fósiles escasean y el hecho de apostar por lo eléctrico puede ayudar a un país como Kenia a darle la bienvenida a una nueva empresa que podría suponer la llegada de miles de euros. Una empresa como al que fabrica Opibus no tiene porque ser una excepción, en un futuro marcado por las oportunidades.
Así es Opibus el primer autobús eléctrico hecho en África
Parte del equipo de Opibus es holandés, aunque han sido los desarrolladores africanos los que lo han hecho rodar por las carreteras de Kenia. Más allá del exterior, tenemos un tipo de vehículo que puede aportar grandes sensaciones sobre un camino marcado por un reto conseguido con creces.
La batería de iones de litio que carga este autobús dispone de una capacidad bruta de 121 kWh. Por el peso y las prestaciones que ofrece, se puede recorrer en una sola carga un máximo de 121 kilómetros. Una cifra que se ha convertido en la inicial para un modelo de lo más práctico que promete encaminarse hacia un futuro verde en África.
La parte práctica es la que mejor lleva este autobús eléctrico que es capaz de cargar con un motor con 225 kW, unos 300 caballos, y 706 Nm de par motor. Permite una aceleración de hasta 110 kilómetros por hora en apenas unos segundos. Una potencia que pocos de estos vehículos son capaces de conseguir.
Puede recargar por completo su batería en apenas 30 minutos, el tiempo que tardan en subir los pasajeros y poco más. Hay ya una comanda hecha a Optibus de 10 unidades que puede ser el inicio de una de las grandes empresas del sector del autobús eléctrico. El hecho de que esté diseñado y creado en África le añade un valor añadido. Han conseguido salvar las principales dificultades y adaptarse a las exigencias de un mercado en el que lo práctico es lo que se acaba imponiendo en todos los sentidos. El continente africano también inicia de esta manera su camino hacia la movilidad sostenible.