BYD Seagull es el modelo de coche eléctrico que ha batido todos los récords consiguiendo 10.000 reservas en solo 24 horas. El coche eléctrico chino que está consiguiendo registros sorprendentes tiene un precio de 10.000 euros y es la solución ante el país más grande del mundo y la demanda al alza de estos vehículos.
Hasta la fecha ningún otro coche eléctrico había conseguido estos registros. Ni los más nombrados y vendidos han logrado la avalancha de reservas que se ha convertido en noticia estos días. Se ha llegado a unas cifras que son la antesala de lo que está por llegar a Europa en unos meses.
Bate todos los récords y consigue 10.000 reservas en solo 24 horas
El coche urbano eléctrico chino ya ha conseguido posicionarse en un mercado que pide a gritos la llegada de este tipo de vehículos que son, en esencia, las mejores opciones para unas ciudades libres de contaminantes. China tiene un serio problema con sus mega ciudades que pretende solucionar con la implantación de un coche eléctrico que esté al alcance de todos.
La marca BYD se ha esforzado al máximo para ofrecer un coche eléctrico con la mejor relación calidad-precio hasta la fecha. El precio parece imposible, pero es real, solo 10.000 euros cuesta el coche que rompe récords de ventas en China y no es por casualidad. Si tenemos en cuenta las prestaciones de este vehículo puede acabar siendo el coche eléctrico más vendido de la historia.
Estas son las características del coche eléctrico chino
Antes de que nos emocionemos con el precio y la posibilidad de poder tener un coche eléctrico, debemos tener en cuenta que es un vehículo pequeño. Es decir, tiene unas dimensiones reducidas, longitud de solo 3,78 metros, una anchura de 1,71 metros y una distancia entre ejes de 2,5 metros, de ahí en parte su precio.
Dispone de un solo motor eléctrico con una potencia de 55 kW, es decir, 74 CV, suficientes para recorrer cualquier ciudad o carretera del país. Además de esta potencia decente también permite moverse con una gran autonomía, entre 300 y 400 kilómetros. Una batería que consigue buenos resultados y, además, permite una carga rápida en 30 minutos.
Para un país como China con millones de usuarios aspirantes a un coche eléctrico, los puntos de recarga son esenciales. Al igual que sucede en Europa o en nuestro país, es importante disponer de las suficientes estaciones de carga para cualquier tipo de vehículo que nos asegure que estamos ante un coche eléctrico que nunca nos fallará.
De momento no se sabe si llegará a España, el mercado europeo mira con recelo los nuevos coches eléctricos chinos que están rompiendo récords, pero sigue apostando por las marcas convencionales. La llegada de este tipo de coches es, en definitiva, una forma de moverse por cualquier ciudad y de apostar por los low cost de la carretera.
Con sus más y sus menos, la presentación de este pequeño coche eléctrico acumuló en China y en solo 24 horas, un total de 10.000 reservas. Una cantidad enorme de personas estaban pendientes de la salida al mercado de uno de los coches eléctricos que puede cambiar por completo las grandes ciudades chinas.
Se espera que sus ventas vayan en aumento y se pueda producir a gran escala, incluso, podría acabar llegando a Europa si cumple con los estandartes de calidad de este continente. China de momento, vende como churros su modelo más aplaudido entre los millones de urbanitas que buscan una forma sostenible y eficiente de moverse por la ciudad.