Permitirse un coche eléctrico no es algo que todo el mundo puede hacer, depende en gran medida de lo que se cobra y gasta. Este flujo constante de dinero que llega y se va, debe tener una determinada estabilidad para obtener el pase directo a un coche eléctrico. Depende del dinero que se cobra a final de mes es más o menos fácil permitirse un coche eléctrico. Si quieres desplazarte con este tipo de coche, estos son los euros que debes ganar para dar el paso sin problemas y empezar a ahorrar dinero en cada repostaje.
Un hogar puede permitirse un coche eléctrico siempre que llegue a esta renta mínima
El número de vehículos que se tiene en casa es lo que marca la llegada más tarde o temprano de un coche eléctrico. Según las estadísticas se debe obtener una determinada renta a partir de la cual, podemos estar viendo la llegada de un coche de este tipo a cualquier casa.
No todas las casas optan por un eléctrico, especialmente si no se dispone de un coche principal de gasolina o diésel. Quizás por la falta de confianza en un tipo de vehículo para el que aún no estamos preparados o no tenemos por mano, teniendo en cuenta el tipo de avería que puede sufrir.
Por lo que, las casas con dos coches que puedan tener la capacidad para mantener estos dos vehículos, pero también para pagarlos, es lo que marcará la diferencia. Las rentas más altas, es decir, la suma de dos o una de muy alta, es lo que hará realidad la llegada del coche eléctrico a las casas españolas.
Un coche eléctrico puede llegar a un hogar con esta renta mínima
Según la encuesta de Características Esenciales de la Población y las Viviendas del Instituto Nacional de Estadística (INE) solo el 2’4% de los hogares con un solo vehículo ha optado por un eléctrico o híbrido. Esta cifra aumenta al 5,4% en caso de que haya otro vehículo en el hogar.
El 1% de los hogares con una renta inferior a los 1.000 euros al mes tienen un coche eléctrico. Cuanto menos se gana es más complicado acceder a un coche eléctrico que aumenta de forma significativa a partir de los 5.000 euros al mes cuando el porcentaje ya llega a los 11%.
Cuánto más personas trabajando hay en ese hogar, las posibilidades aumentan, porque en cierta manera es el elemento que marca el inicio de este paso hacia lo eléctrico. El dinero hace más fácil la compra, pero también el mantenimiento de un tipo de vehículo que se ha convertido en el mejor aliado de estos días en los que los precios van en aumento.
El coche eléctrico debe mantenerse y para hacerlo se necesitan unas rentas altas. Un elemento que también aparece en este estudio es el tipo de casa en la que se guardan estos coches eléctricos. El 4,2% tiene un garaje propio, por lo que es más fácil poner un cargador para poder salir de casa con la batería cargada.
El 3’5% poseen una vivienda adosada o un chalet, otro de los factores que hace más sencilla la llegada de un coche eléctrico a cualquier casa. Por lo que las instalaciones son esenciales, un hogar sin garaje o posibilidad de dejar el coche eléctrico en un lugar cubierto hace casi imposible la llegada de este tipo de vehículos.
Dejar un coche eléctrico en la calle, es una opción, aunque solo de menos del 1% de los hogares, que coincide con las rentas bajas.