Uno de los miedos de todo comprador de coche eléctrico pasa por saber cuánto costará mantener este tipo de vehículos. La novedad a la hora de adquirir un coche de estas características es total, desde cómo asegurarlo, hasta cómo mantenerlo, dada su mecánica. Si nunca hemos tenido este tipo de vehículos, queremos dar el paso y no sabemos cómo, los expertos siempre tienen la solución.
Saber qué tipo de coche elegir en estos tiempos complicados para poder ahorrar pasa por conseguir un eléctrico. No solo por las subvenciones que los hacen más accesibles, sino también por el hecho de que son más fáciles de mantener. Además de que se consigue un ahorro significativo en cuanto al combustible se refiere.
Este es el coste de mantener un coche eléctrico
GIPA realizó una encuesta a los conductores que dio como resultado un contundente 44% del total de participantes pensaban que mantener un coche eléctrico es mucho más caro. Existe la creencia que, al tener un sistema distinto, pasan más por el taller o deben disponer de un mantenimiento que sea adecuado de más inversión que uno convencional.
Ni un coche eléctrico ni uno de combustible se salva de pasar por el taller. Hay muchos factores que afectan a aquellos que quieran encontrar en este tipo de vehículos la solución en su día a día. Siempre es mejor optar por realizar un buen mantenimiento y seguir las instrucciones del fabricante, aunque a veces los errores ocurren.
Los expertos recomiendan en todo tipo de vehículos acudir cada año a la revisión para que de esta forma todo esté bajo control. Aunque siempre pueden surgir contratiempos, es la forma de prevenir cualquier problema que se pueda detectar en su fase inicial. Ya sea de un coche eléctrico o diésel, ninguno se salva.
Víctor Pardo, Market Manager y Proyectos Taller de Norauto, explicó en el ABC que: “Los vehículos eléctricos no sufren más averías que los gasolina o diésel. Todo lo contrario. Los eléctricos puros o la parte eléctrica de los híbridos sufren menos averías si lo comparamos con un motor de combustión. De hecho, un coche eléctrico tiene menos piezas que un automóvil de gasolina o diésel y, por lo tanto, su mantenimiento es menor”
A esta afirmación, añade que: “También hay que tener en cuenta que los coches eléctricos tienen muchos menos fluidos que mantener que los de combustión interna”. Con lo cual, hay menos probabilidades de que se dañe un motor que debe siempre funcionar con todas las garantías posibles y una energía limpia.
Al tener menos piezas el mantener un coche eléctrico es más barato
La estadística es una fuerza universal, cuantas menos probabilidades de que se rompa algo hay es cuanto menos objetos por romperse tenemos. Este hecho es importante a la hora de calcular cuánto nos costará mantener nuestro coche eléctrico. Teniendo en cuenta que es una tecnología más nueva, los errores tienden a ser menores, aunque nadie se salva de un vehículo que no tenga todas las garantías.
Con lo cual, gracias a un correcto mantenimiento con una revisión que los primeros kilómetros suelen ser gratuita se detectan a tiempo infinidad de irregularidades. La propia garantía es la que cubre los errores, de esta forma, no tiene ningún coste añadido al usuario. Es importante tener en cuenta esta garantía y aunque suponga pagar un poco más, el descanso y la tranquilidad de tener una buena cobertura es total.
Los descuentos y las bonificaciones en impuestos hacen que hoy en día sea más barato mantener un coche eléctrico que uno de gasolina o diésel. La tendencia es a bajar los precios de los coches eléctricos para que acaben sustituyendo poco a poco los de combustión.